Nacimos con la gran misión de expresar lo mejor de nosotros mismos. Así que hoy, olvidate del mundo, sacate la máscara y salí a la vida a jugar sin miedo. Tu esencia está gritando. Es hora de empezar a conectarte con tu propio ser. No hay más tiempo. El cambio se acerca.

Respiremos tres veces con profundidad. Liberemos los bloqueos que nos oprimen. Abramos nuestra conexión directa con el Universo. Recibamos el Amor Incondicional que nuestra esencia merece. Todo vuelve. ¡Hermoso domingo, compañeros de viaje!

¿Decimos todo lo que tenemos que decir? Una gran forma de amarnos y de honrarnos es ser coherente entre lo que pensamos, lo que hablamos y lo que hacemos. Por lo menos hoy, seamos cuidadosísimos con nuestras palabras y nuestros silencios. Eso también es amar.

 

 

La energía luminosa se reproduce, no hay otro misterio. El dar incondicionalmente provoca una espiral de amor que multiplica su efecto milagroso. Si amás, el amor vuelve. En la forma que sea, en la persona que más te convenga, pero regresa a vos. Es Ley Universal.

 

"Nada sucede por casualidad. No existe la suerte. Hay un significado detrás de cada pequeño hecho. Quizás no pueda ser visto con claridad de inmediato, pero lo será antes de que pase mucho tiempo."

Cada vez que ponemos más Amor en nuestra vida, el Universo nos recompensa. Nuestra vibración amable hace que los milagros ocurran no solo en nuestra realidad. En el mundo entero también. Esta noche, les regalo mi mejor sueño, terrestres.

 

 

 

 

¿Quién te hizo daño? Los culpables son una ilusión. No existen. Están para ayudarnos a que nuestras excusas crezcan y nos separen de nuestra capacidad para ser responsables y concientes. No hay culpables. Pero tampoco hay culpas.